Capítulo 8 -Summer Love (Zayn)

CAPÍTULO 8

Sentías mucha luz, abriste los ojos y los volviste a cerrar. Alguien había abierto la ventana demasiado y los potentes rayos del sol atacaban tus ojos. Entonces escuchaste el sonido de una gaviota, tu cama se movió. No, espera. No era tu cama. Era una barca. 

Zayn estaba abrazado a ti. Ahora lo recordaste. Zayn te llevó a dar un paseo en barca, te declaró su amor y os dormisteis ahí. Miraste tu reloj y viste que eran las nueve y cuarto de la mañana, en una hora y media debías estar en la entrada del hotel para la primera clase de fotografía y estabas a 60 kilómetros de allí en el mar. 

Zarandeaste a Zayn para despertarlo. Se levantó de un salto y su cara de susto sería memorable.

-Zayn son las nueve y cuarto de la mañana, nos hemos dormido aquí.

-Ya, ya veo.- Decía mientras se arrascaba la cabeza y miraba de un lado al otro.

-Vamos, vámonos. En una hora y media tengo que estar lista en el hotel.- Zayn te miró y se rió.- ¿De qué te ríes?- Dijiste confusa.

-Ven aquí.- Sus manos acariciaron tu cara y te besó, cosa que te calmó bastante. Pegó su frente a la tuya mientras os mirabais a los ojos.- Relájate, llegaremos a tiempo, confía en mi.

-Confío en ti.- Y le volviste a besar.

Se levantó y se sentó en un asiento para remar. Llegasteis a la orilla y comenzasteis a correr hacía el tranvía. Os montasteis y arrancó. A la media hora aún os quedaba medio camino y a ti una hora escasa para llegar y preparar las cosas. Movías el pie intentando descargar todo el extrés que tenías. Zayn, qué estaba de pie detrás de ti, te abrazo por detrás y te susurró al oído:

-Pequeña vas a llegar no te preocupes, aunque tenga que llevarte yo volando, tranquila.- Te besó el cuello, lo que te dió un escalofrío. Él se rió.

-No puedo relajarme si me besas así..- Dijiste mientras sonreías.

-¿Beso mal?

-Al revés. Besas demasiado bien.

-Jajaja.

Pasaron las paradas. Los últimos cuarenta minutos antes de llegar a la parada los pasasteis abrazados el uno al otro, besándoos y abrazandoos. Todo era demasiado perfecto.

Llegó tu parada. Bajaste de la mano de Zayn. Quedaban veinte minutos y estabas a cinco del hotel.

-Zayn no me da tiempo.

-Hmmm... Ven.

Te cargó a su espalda. Tus brazos se entrelazaron en su cuello y él comenzó a correr hacia el hotel.

Tenías ganas de gritar. De gritar lo más alto posible el innumerable número de felicidad que tenías guardada en tu interior. De gritar lo mucho que lo amabas.

Te limitaste a rozar tus labios en su oído y susurrarle:

-Te quiero Zayn.

Él sonrió. De pronto divisaste el hotel frente al mar. Se paró en la puerta.

-Ya hemos llegado señorita.

-Jaja. Muchas gracias Zayn.- Dijiste mientras bajabas de su espalda. Te pusiste a su altura y le mirase a los ojos, a sus preciosos ojos marrones.- Muchísimas gracias por lo de esta noche, ha sido increíble.

-Como tú.- Te besó- Ahora corre o no llegaras.

-Adiós precioso. Te quiero.- Le besas la mejilla y te das media vuelta corriendo hacia la puerta del hotel.

-¡TE QUIERO PEQUEÑA!- Oyes gritar antes de cerrar la puerta tras de ti.

Subes las escaleras lo más rápido que puedes. Aún te quedan 15 minutos. Te metes en la ducha corriendo y al salir te pones esto:

Saliste preparada del baño y fuiste corriendo al buffet antes de que cerraran, aun te quedaban seis minutos y estabas muerta de hambre.

Llegaste y viste a Niall allí, apurando hasta el último segundo junto a la comida y te reíste. Fuiste a su lado.

-¿Niall que haces quí aún?

-¿Y tú _____?

-Jaja una historia muy larga. Voy a por algo, ¿me esperas?

-¿Aún no has desayunado?- Niegas con la cabeza- Está bien te espero.

Fuiste a la barra y pediste un zumo de fruta y un donuts para llevar. Te lo dieron. 3 minutos. Corriste junto a Niall.

-¡Vamos!

Cuándo llegásteis Harry estaba pasando lista. Joaquín estaba a su lado orgulloso, parece ser, del buen trabajo que estaba haciendo Harry.

-Jhonson. ¿Señorita Jhonson?- Su mirada recorría todo el grupo de alumnos. Su cara se entristeció. ¿Por no encontrarte allí?

-¡Aquí estamos! Sentimos el retraso.- Dijiste gritando mientras llegábais y te colocabas junto a Liam y Lara que os miraban con sorpresa.

-Señorita Jhonson, que sea su última falta de puntualidad.

-Sí Harry- Toda la clase te miró extrañada, se supone que no se puede coquetear con los prfesores aunque estén en prácticas.- Digo, sí profesor.

Bajaste la cara avergonzada. Él terminó de pasar lista mientras tu terminabas tu desayuno express y te deshacías de él.

Cogisteis vuestras cámaras y salísteis del hotel. Joaquín os indicó el lugar de hoy. La playa de "Lilabindo" un pequeño rincón de la isla a la que no todo el mundo tenía acceso por eso la hacía tan especial.

Te quedaste sin quererla última de la fila, y al salir a la calle alguien te agarró del brazo. Te giraste y ahí estaba él, Harry o el señor profesor.

-En las clases, para ti y para todos, soy el señor Styles o profesor. No te sientas especial por saber mi nombre.

¿Pero qué mosca le había picado? ¿Por qué estaba tan serio y te hablaba de esa manera? Y ahora nadie os veía, era como vuestro encuentro en el pasillo, ¿por qué te trataba así?

Te había cabreado su forma de tratarte, está claro que a el no le importó aquel beso en la mejilla tanto como a ti, pero entonces, ¿por qué te abrazó y tonteó contigo? ¿Era bipolar? ¿Imbécil tal vez?

-Vale, lo siento señor Styles. Siento ser tan creída y sentirme especial por saber su nombre. Le prometo que no volverá a pasar.

Te giraste y aligeraste el paso para pillar a tus amigos que ya iban bastantes pasos más adelante que tú, pero parece ser que él no había terminado de hablarte.

FIN DEL OCTAVO CAPÍTULO