viernes, 26 de abril de 2013

Capítulo 22 -Summer Love

CAPÍTULO 22
"Dos Palabras"



Te fuiste de su vista, hacia tu armario. Guardarte tus cosas y hiciste la maleta. En un par de horas estaríais viajando hacia Italia, Roma. Cuando terminaste Harry salía del baño, se estaba duchando. 
-¿Ya has hecho la maleta?- Te dice sonriente. Tú no lo estás con él.
-Sí. ¿Vas a despertar a Lara, Harry?
-No, la dejaré dormir un poco mientras la voy haciendo la maleta yo. 
-¿Tú? ¿Por qué?
-Para que cuando se levante lo tenga todo preparado y no se tenga que preocupar de nada.
-No, yo se la hago.- Dices dirigiéndote a por su maleta.
-¿Celosa?
-Que va, pero es que no me fío de ti.
-¿Y este cambio? Siempre...- No le dejaste acabar.
-Sí Harry, he cambiado, las personas cambian ¿sabes? Vete a tu habitación a hacer tu maleta , yo termino aquí.
-Pero quiero esperar a que se despierte. No quiero dejarla sola al despertar.
-Harry, no se va a morir por no verte. No tengas tanto ego.
-Bueno, bueno ya me voy doña desagradable.
-Me alegro, ahí está la puerta.- Le dices señalándosela.
-Puff..- Resopla te mira con un poco de odio en sus ojos y se va.
Para él tu cambio de humor drástico es complicado de asimilar, ya que no sabe nada de lo que pasó anoche. Pero es que es verle la cara y por más que te esfuerzas no te sale una sonrisa, sino enfado.
Haces la maleta de Lara y cuando terminas coges tu bolso y piensas en salir y coger algo de comer antes del viaje. Las dos maletas están juntas, cerca de la puerta. Lara se despierta.
-Anda, hola _______.- Dice aún adormilada.
-Hola Lara.
-¿Sabes dónde está Harry?
-Se fue, hace unos 40 minutos.
-¿A dónde?
-A hacer la maleta.
-¿Qué te pasa? Estás muy...
-¿Desagradable?- Dices irónica.
-Sí.
-Me lo han dicho.- Y sales por la puerta.
Te vas al buffet y coges un sándwich vegetal y un refresco. Te sientas en una mesa libre y sacas el móvil mientras saboreas el almuerzo. 
Ningún mensaje suyo, ninguna llamada. Nada. Zayn te lo había dejado claro, no quería saber nada de ti. Pero no querías admitirlo. No querías irte sin volver a verle, sin tener noticias de él. Marcas su número. Piensas antes todas las posibles respuestas, pero pulsas el botón y ya no hay marcha atrás está comunicando.

*COMIENZO DE LA LLAMADA*
-¿Sí?- Su voz, su perfecta voz otra vez.
-Hola Zayn, soy ________.
-Lo sé. ¿Qué quieres?
-Volverte a ver. Aunque sea la última vez, luego puedes olvidarte de mi.
-No puedo olvidarte, ese es el problema. Debería odiarte pero no puedo.- Eso te dio una chispa de esperanza.
-¿Vendrás a verme entonces? A la una y media debo estar en el aeropuerto, mi vuelo sale a las dos.
-No se _______, estoy muy confuso. No se que hacer contigo, bueno con nosotros. 
-Vale, déjalo. Estas cosas no hay que pensárselas tanto. Solo te digo que vengas, para que te pueda ver una última vez, para tener un mejor recuerdo, pero no te voy a obligar, eso está claro.
-Es que no se que hacer. Porque yo te sigo queriendo, pero no tengo explicación a lo de la fiesta, entonces no se si arriesgarlo todo o dejarlo pasar.
-Si de verdad me quisieras, no buscarías excusas y vendrías a arreglarlo.
*FIN DE LA LLAMADA*
Le cuelgas, lo has escuchado todo. Tienes razón en tu última frase, si de verdad estuviera tan enamorado como lo estás tú habría venido a buscarte, a escucharte y a perdonarte. Si dudas, no hay confianza, no hay amor.
Te terminas tu comida. La una. Media hora aún. Te vas al único lugar que te relaja de esta isla, su playa.
Caminas bajo los potentes rayos de sol que hoy quieren hacerte morir de calor. La arena se cuela entre los dedos de tus pies, provocándote cosquillas. Aquí conociste a Zayn. Deseabas más que nada en el mundo que volviera a preguntarte la hora, que volviera a llevarte a las piedras, deseabas más que nada volver a verle, pero eso era complicado. Te giras, y como no, no está. Sigues andando. Muchos chicos te miran, otras veces te hubieras sonrojado, hoy no. Tu corazón está ocupado.
Y veinte. Deberías subir a por tus cosas y juntarte con el resto de alumnos para ir al aeropuerto, que estaba a diez minutos del hotel. Subes corriendo y cuando bajas a recepción ya está todo el grupo.
-Hombre señorita Jhonsonn, menos mal que aparece. Siempre se hace de rogar.
-Lo siento Joaquín.
-Bueno chicos, ahora que estamos todos... vámonos.
Cogéis vuestras cosas y salís de recepción. Harry y Lara no paran de lanzarse miraditas, sin cortase de que alguien se percate. Esto ya empieza a dar miedo.

Sentada en uno de los asientos de espera del aeropuerto esperando para embarcar, al igual que hace dentro de una semana. Quién iba a saber que te iban a pasar tantas cosas en tan poco tiempo: Conociste a Zayn, el encontronazo con Harry en el pasillo, dormiste en el mar con Zayn, empezasteis a salir cuando te declaró su amor por ti, Harry quiere hacerse amigo tuyo, una llamada extraña de una chica desconocida, una fiesta, un beso, un puñetazo, un último adiós y una pareja que no deberían estar juntos.
Que estrés, tan solo de recordarlo. Diez minutos para embarcar. Liam y Niall están muy a gusto sentados con sus móviles, pero tu no aguantas otro segundo quieta así que empiezas a andar de un lado a otro sin marcharte muy lejos del grupo. Lara y Harry no están y eso no es bueno, son los únicos que faltan.
Zayn no vino a verte, no quiso más bien. Pero o te había mentido por teléfono, o estabas confusa o las dos cosas a la vez. Te paras frente al grupo. Italia, nuevo destino, nuevos lugares y nuevas experiencias.
-"Pasajeros del vuelo 897 con destino Roma, pasen por la puerta de embarque".
Tu vuelo. Hora de marchar, de dejar la increíble Creta.
Te esperas la última para ver si aparecen los dos tortolitos y encubrirlos. Te tapan los ojos, ellos.
-Perdona, ¿tienes hora?
No podía ser, no podía se él. Tocas delicadamente sus manos, algo que te fascina de los hombres. Son suaves, con dedos largos y fríos. Es Zayn.
-Za-Zayn... ¡Zayn!- Te lanzas a sus brazos y le abrazas muy fuerte.
-Jaja, no te has olvidado de mi nombre.
-No me he olvidado de nada de ti.
-Ni yo de ti.
-¿Qué haces aquí?
-Pues nada que bajé a por pan y te vi... ¿Tú que crees? He venido a verte. Lo he estado pensando mucho y bueno no podía dejar que mi chica se fuera sin mi, sin verla o besarla una vez más- Te coge la cara y te besa. Parece que nada entre vosotros ha cambiado, todo sigue igual.
Ese beso te hace llevar al vago recuerdo de aquella barca, en mitad del mar, de la noche, dormida bajo sus brazos. En la playa, tumbadps bajo el sol de una palmera.
Pero estáis en la puerta de embarque del avión que te separará de él.
-Espera un segundo, ¿has dicho que me fuera sin ti?
-Sí bueno, también he estado pensando en eso y creo que... Me voy a perseguirte por Europa con Louis.
-¿CÓMO? REPITE ESO.
-No te voy a dejar sola ni un segundo, te vas a aburrir de mi.
-Nadie se aburre de lo que desea.- Y le vuelves a besar.
-"Última llamada para los pasajeron del vuelo 987 destino Roma".
-Zayn...
-Dime mi amor.
-Es mi vuelo.
-Lo se, pero no te preocupes, Louis y yo saldremos esta noche y llegaremos de madrugada, mañana estaré contigo. 
-¿Mañana? Prométemelo.
-Te lo prometo, ¿te crees que te dejaría sola con todos los romanos?- Niega con la cabeza- Ni de coña, tengo que estar para protegerte.
-Te quiero Zayn, te quiero mucho.- Le abrazas y le besas el cuello.
-Mañana nos vemos pequeña.
-Contaré las horas.
-De acuerdo.
Coges la maleta y la dejas en la máquina. Le miras una última vez, te lanza un beso y un guiño y una sonrisa mientras tú le susurras un 'te quiero'. Te das media vuelta y entras dentro.
Una vez en el avión, te sientas en el sitio que te han guardado Niall y Liam.
-Vale, explícanos tu retraso.- Dice Liam.
-Sí, creía que nos íbamos sin ti. ¿Qué ha pasado?
-Dos palabras, Zayn Malik.

FIN DEL CAPÍTULO

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